Cuatro años le tomó pagar una deuda de $ 5.300 que tenía con una de sus tarjetas de crédito y para eso dejó de usarla y los dos últimos años cancelaba dos y tres veces más de la cuota mínima. Si no lo hubiera hecho de esa manera Patricia seguiría endeudaba por más años por las compras diarias y cotidianas que hacía cuando se le acaba el efectivo, por eso se cuida mucho en esta época.
Es que las ofertas ya están en todos lados, y no solo de los almacenes con porcentajes de descuento sino también de las tarjetas para financiar esas compras con o sin intereses y con meses de gracia, es decir que los gastos de hoy se empezarán a pagar en febrero, marzo e incluso desde junio del 2023.
Ahí hay que tener en cuenta que se están comprometiendo los ingresos que aún no se ganan en fechas donde habrá otros gastos como las matrículas y compras por periodo escolar, y otras celebraciones como Día de la Madre y del Padre.
Sobrecargar el cupo es una de las cosas qué no se debe hacer con la tarjeta de crédito. La especialista en finanzas personales Bertha Romero lo indica en el programa de educación financiera Tus Finanzas. “Exceder el uso de las tarjetas durante las fiestas puede dañar tu puntuación de crédito porque aumenta la utilización de crédito” y eso se refiere al porcentaje de crédito disponible que está usando.
La clave está en tener un presupuesto, escribir para quién, qué y cuánto costarán los regalos. Así se lleva un control para mantener los saldos de las tarjetas bajos, sobre todo cuando se tiene planificada una compra mayor como un carro o una vivienda.
Incluso hay que tener claro que la temporada navideña recién empieza.
“Es importante realizar un consumo responsable y ajustado a nuestras necesidades y al presupuesto que tenemos, considerando que después de Black Friday vendrán las ofertas navideñas, lo que podría terminar en problemas de endeudamiento durante los primeros meses del año siguiente”, indica César Coronel, abogado y gerente general de Defensa Deudores en Ecuador.
También alerta de otros cuidados que se deben tener. “En muchas oportunidades hemos observado marcas que suben el precio de sus productos unos días antes del Black Friday para que -una vez aplicado el descuento- quede en un valor similar. Al mismo tiempo, suelen darse casos de publicidad engañosa cuando el producto real no se parece al de la publicidad, sus funciones son diferentes a las anunciadas o existe información incompleta sobre las condiciones del producto, impuestos e intereses”.
Para evitar algún inconveniente, sugiere conocer anticipadamente el precio de lo que se quiere comprar. Saber cuánto cuesta el producto ahora, cuánto costó antes y cuánto podría costar en temporadas de ofertas.
- Evaluar el mejor método de pago. Siempre es preferible en efectivo, pero si se utiliza la tarjeta de crédito es importante definir si se hará con pago corriente, diferido, sin intereses o con meses de gracia.
- Comparar los precios por más atractivo que parezca el descuento para elegir la mejor opción.
- Considerar todos los costos extras que acarrea la compra, como los impuestos al valor agregado (IVA), a consumos especiales (ICE) o a la salida de divisas (ISD) en caso de compras internacionales.
- Pensar en el futuro. Después del Black Friday vienen las festividades navideñas, por lo que en caso de recurrir al endeudamiento habrá que considerar de dónde saldrán los recursos para pagar sin perder de vista los gastos fijos.
- No caer en la tentación de promociones del momento, para ello revisar lo que se tiene en casa y pensar lo que de verdad se necesita adquirir.
Tus Finanzas también recomienda evitar las compras impulsivas que pueden aumentar rápidamente el gasto total de la tarjeta de crédito durante las fiestas y tiene un truco: la regla de las 24 horas. “Si encuentras algo que quieres comprar y que no entra en tu presupuesto para las fiestas, espera 24 horas y vuelve a revisar el artículo. Así tendrás tiempo suficiente para reflexionar y decidir si la compra merece la pena”. (I)
Fuente: EL UNIVERSO