Las calles de Buenos Aires fueron testigo de una masiva protesta contra los recortes realizados por Javier Milei, presidente de Argentina, al Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, un símbolo de la cultura del país. La decisión del mandatario obliga al instituto a suspender programas de apoyo, no renovar contratos y reducir horas extra, como parte de los ajustes fiscales emprendidos para contener la inflación y alcanzar un objetivo de déficit cero este año.
La marcha, que también contó con la participación de estudiantes de la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (ENERC), se vio empañada por enfrentamientos con la policía cuando los manifestantes se encontraron con las fuerzas del orden. Finalmente, la multitud fue dispersada con gases lacrimógenos, en un contexto donde las protestas que interrumpen el tráfico están prohibidas según un nuevo protocolo en Argentina.
