El presidente de EE.UU., Joe Biden, dio este viernes la orden al Pentágono de derribar un objeto no tripulado que volaba en el espacio aéreo de EE.UU., sobre el estado de Alaska.
El incidente se produce días después de que las autoridades de EE.UU. detectaran la presencia de un globo espía chino sobre el cielo de Montana, en el noroeste del país, lo que causó una grave crisis diplomática con China. Montana es un estado muy poco poblado, pero que alberga cerca de 150 silos nucleares.
La decisión de Biden, al que los republicanos criticaron con dureza por no derribar al globo con más rapidez, se tomó «por precaución», aseguró John Kirby, portavoz de la Casa Blanca para asuntos de seguridad.
Las autoridades estadounidenses no han confirmado si se trataba de nuevo de un globo ni si era chino, después de que esta semana advirtieran de un programa global de vigilancia de instalaciones militares de 40 países en todo el mundo con este tipo de artefactos por parte de China.
Tampoco detallaron si el objeto derribado llevaba equipamiento para vigilancia, pero sí que volaba a una altura -12.000 metros- que lo podía convertir en un «riesgo razonable» para el tráfico aéreo comercial, explicó Kirby.
El objeto era pequeño, del tamaño de un coche, mucho menor que el globo derribado esta semana, que equivalía a tres autobuses.
El objeto fue localizado en el Ártico el jueves por la noche, fue derribado en la mañana del viernes y ha caído sobre agua helada, lo que se espera que permita recuperar y estudiar sus restos.